Participamos en una investigación pionera para reducir la población de la mosca del establo en nuestros santuarios
Las moscas de establo, Stomoxys calcitrans, son conocidas por infligir picaduras y dermatitis dolorosas a los équidos, causan pérdidas económicas sustanciales en todo el mundo y transmiten enfermedades graves.
Los métodos actuales de control químico enfrentan desafíos de resistencia y riesgos ambientales.
Para abordar esto, hemos participado en una investigación científica pionera liderada por entomólogos en la que hemos testeado un enfoque respetuoso con el medio ambiente de Manejo Integrado de Plagas (MIP) en nuestro santuario de Doña Rosa (Badajoz).
Esta estrategia combina prácticas de higiene y manejo del estiércol, protección a los animales, la liberación de enemigos naturales y autóctonos que atacan las etapas inmaduras de la mosca (ácaros depredadores y dos especies de avispas parasitoides) y un sistema de trampas especializado para los ejemplares de moscas adultos.
El estudio destaca el uso de esta estrategia holística hacia un método sostenible y respetuoso con el medio ambiente para el control de moscas del establo. Este enfoque tiene como objetivo mitigar los daños ocasionados a los équidos y reducir la dependencia de insecticidas tradicionales, contribuyendo así al bienestar de los équidos y la salud del ecosistema.
El desarrollo larvario ocurre en diversos sustratos, incluyendo material vegetal en descomposición y estiércol, mientras que los ejemplares adultos representan una amenaza al alimentarse de sangre tanto de animales como de humanos.
Los métodos convencionales de control químico, predominantemente dependientes de insecticidas, no solo conllevan riesgos ambientales, sino que también enfrentan desafíos pues las moscas resistencia entre las poblaciones de moscas del establo. Para abordar este problema, se ha propuesto una estrategia de manejo integrado de plagas (MIP) para el control de moscas del establo.
Este enfoque ha involucrado una combinación de prácticas, entre ellas:
1. Higiénicas y de manejo del estiércol.
Todos los establos se han limpiado y desinfectado cada 15 días y el estiércol retirado a un lugar alejado con varias trampas de moscas. Este estiércol es recogido periódicamente.
Los establos se desinfectaban al retirar el material de cama utilizando un producto antibacteriano, antiviral y antifúngico que contenía cloruro de didecil dimetil amonio al 6.9% (SANITAS®) o otro producto que contenía principalmente biphenyl-2-ol al 4.0% y clorocresol al 0.90% (Zotal®). Los comederos también se desinfectaban al menos dos veces al mes.
2. Evaluación del Bienestar y Medidas de Protección en Burros
Un equipo veterinario evaluó el estado de bienestar de aquellos animales que mostraban lesiones cutáneas severas (en total 14 burros) causadas por picaduras de S. calcitrans desde mayo de 2021 hasta noviembre de 2023. Se inspeccionaban los animales seleccionados mensualmente para evaluar el área afectada (cabeza, pecho y número de extremidades) y la gravedad de las lesiones cutáneas.
Además, se emplearon múltiples medidas de protección para prevenir el contacto directo y las picaduras, como mantas protectoras, botas para moscas, mosqueros y polainas de malla en esos 14 burros y otros si era necesario (esto no afectó la interpretación de los resultados), así como repelentes tópicos, que pueden minimizar significativamente el riesgo de picaduras de moscas Stomoxys y garantizar el bienestar de los équidos.
Dado que las moscas tienden a atacar las partes inferiores de las piernas de los burros, se pueden usar leggings de algodón u otros materiales repelentes de moscas como medida de protección. En todo momento, el bienestar de los burros prevaleció sobre las pautas del estudio.
En cuanto a la protección química, se aplicaba deltametrina pour-on (BUTOX, emulsión pour-on®) dos veces al año, a principios de primavera y durante el verano. En los picos de abundancia, para los burros más afectados, se rociaban productos repelentes (Tri-Tec 14™ y Pody® care) en los cuerpos de los burros para protegerlos. Estos productos contenían ingredientes como piretrina, permetrina y tetrametrina.
3. Liberación de enemigos autóctonos naturales que atacan las etapas inmaduras de la Stomoxys calcitrans.
Se utilizaron tres especies distintas de agentes de control biológico para gestionar la S. calcitrans. Estos incluyen el ácaro depredador M. robustulus y dos avispas parasitoides: Spalangia cameroni Perkins y Muscidifurax raptor Girault y Sanders (Hymenoptera, Pteromalidae) bajo las marcas comerciales Biomite® y Biowasp®. Los parásitos biológicos fueron liberados en la granja como parte de protocolos para controlar las etapas inmaduras de la mosca del establo (huevos y larvas).
Desde el 15 de junio de 2022 hasta el 1 de septiembre de 2023, se llevaron a cabo un total de 14 liberaciones en la granja (6 en 2022 y 8 en 2023), presumiblemente involucrando un estimado de 2,200,000 ejemplares de ácaros depredadores (M. robustulus) y 1,316,000 avispas parasitoides (S. cameroni y M. raptor, con un 50% de cada especie) durante la temporada de moscas del establo.
Los agentes de control biológico fueron distribuidos manualmente de manera uniforme en diferentes establos. Estos depredadores viven en las áreas de residuos y estiércol y se alimentan de las larvas y huevos de la S. calcitrans, ayudando a reducir así su población.
4. Sistema de trampas especializado para los ejemplares adultos.
Se instalaron 21 trampas Stomoxycc® en todo el santuario como un componente clave de esta estrategia de MIP.
En el artículo completo (en inglés), presentamos la aplicación y los resultados de la estrategia de MIP utilizada y brindamos información sobre su uso como una opción sostenible y respetuosa con el medio ambiente para controlar las poblaciones de moscas del establo.