Un salvavidas para las familias de Perú y sus burros
Las comunidades de propietarios de burros de zonas rurales de Perú han recibido formación y equipamiento esencial gracias a un proyecto de colaboración impulsado por The Donkey Sanctuary, nuestra organización matriz, en colaboración con la organización local Innovar y Compatir.
El proyecto ayudó a aliviar la presión bajo la que se encontraban las familias del distrito de Maras, en Cusco, tras el repentino cierre provocado por el estallido de la pandemia de Covid-19.
Los habitantes de Maras son familias humildes que se ganan la vida con sus pequeñas explotaciones agrícolas y el cambio climático ya ha empezado a causar estragos en la vida cotidiana de los burros y sus propietarios.
Eduardo Santurtun, Director Regional de América Latina y el Caribe, afirma: "La pandemia no hizo más que agravar los problemas a los que se enfrenta la gente de Maras. Las familias se quedaron de repente sin ingresos para comprar semillas y cultivar alimento de buena calidad para sus burros.
"El proyecto es un gran ejemplo de la colaboración con diferentes públicos que tienen impacto en el bienestar de los burros y mulos de trabajo para conseguir un cambio sostenible, desde la comunidad, pasando por los profesionales veterinarios y el gobierno local hasta los turistas".
Afortunadamente, The Donkey Sanctuary e Innovar y Compartir han sido capaces de ayudar a estas comunidades.
Hasta ahora, el proyecto ha proporcionado formación a 49 familias, ayudándolas a mejorar la dieta de sus animales, y semillas para proporcionar forraje a 172 burros durante todo el año.
Otras 42 familias se beneficiaron de nuevas cuadras, comederos, bebederos y piedras de sal.
Antes de suministrar estas provisiones, más de 100 burros en Maras carecían de los refugios necesarios para protegerse de las condiciones meteorológicas extremas, como las lluvias torrenciales y el granizo, que son más habituales durante periodos más largos debido al cambio climático.
Ahora, más de 170 burros disfrutan de mejores condiciones de vida y tienen un lugar seguro en el que descansar cuando llega la noche.
The Donkey Sanctuary donó 73 cabezadas para para ayudar a prevenir las heridas causadas por los arneses y sus ajustes, y se formó a seis nuevos “Embajadores locales de Bienestar Animal” para solucionar el escaso acceso de los burros y sus dueños a cuidados y atención veterinaria.
Nuestro trabajo no termina ahí. Este año tenemos previsto reforzar y aumentar las acciones que apoyamos inicialmente, y ayudar a más burros y familias en dos nuevas zonas de Maras, Mullacas y Kacllaraccay. Todo esto no sería posible sin la generosidad de nuestros colaboradores.